Schwabisch Hall (Alemania)

** Etapa anterior: Augsburgo **

Desde Augsburgo, nos dirigimos al encantador pueblecito de Schwabisch Hall, a 169 kms. Para ello, ponemos en el GPS las coordenadas de la zona de aparcamiento que hay justo detrás de la igleisa (49,11251, 9,73882) y hacia allí nos vamos.
Como todavía nos quedan algunas provisiones que trajimos de casa, paramos por el camino en un área de servicio junto a la carretera para comer unos bocadillos.
Una vez en Schwabisch Hall y después de aparcar detrás de la Stadkirche St Michel (Iglesia de San Miguel), aprovechamos para pasar al interior antes de bajar a la plaza. Son 53 los escalones que separan la puerta del templo de la  Marktplatz (Plaza del Mercado). En lo alto de la escalinata ponen un cartel indicando si la iglesia está abierta o cerrada. Es de agradecer, para no hacer la subida en balde.

Iglesia de San Miguel, Schwabisch Hall (Alemania)

Alrededor de la plaza, vemos coquetos edificios de colores junto a otros con entramado de madera, formando una estampa que parece sacada de un cuento.
Destaca también el Ayuntamiento, enfrente de la iglesia, un edificio de piedra con buhardillas y una alta torre.

Marktplatz, Schwäbisch Hall (Alemania)

En uno de los lados, una terraza invita a disfrutar el buen tiempo. En un extremo todavía se conserva la picota donde se exponía a los condenados y, un nivel más abajo, una fuente del siglo XVI, diferente a la que vimos en Munich, pero con la misma función inicial: mantener fresco el pescado que se vendía en el mercado.

Fuente y picota en Marktplatz, Schwäbisch Hall (Alemania)

Desde la plaza, callejeamos dejándonos llevar por la pendiente que nos guía hasta el río Kocher. La tranquilidad de las calles y los bonitos rincones que vamos descubriendo a medida que avanzamos hace que el paseo resulte de lo más agradable.
Junto al río, las vistas de los dos márgenes son de postal.

Schwabisch Hall (Alemania)

Son varios los puentes que cruzan el río. También alguno de madera cubierto, como los que vimos el año pasado en Suiza. Me encanta este tipo de puentes. Y aún veremos unos pocos más en este viaje.

Puente de madera cubierto Roter Steg en Schwabisch Hall (Alemania)

Después de esta corta visita y de descansar y refrescarnos en una de las terrazas junto al río, deshacemos el camino, cuesta arriba ahora, hasta volver al aparcamiento detrás de la iglesia y coger el coche para desplazarnos hata nuestro próximo destino, a 66 kms, el precioso Rothenburg ob der Tauber, donde pasaremos la noche.

** Siguiente destino: Rothenburg of der Tauber **